02-08-14 (diarionorte) El
chaqueño que preside la cámara que agrupa a los expendedores de todo el país
trazó un panorama preocupante del sector, inmerso en la incertidumbre propia de
la economía argentina. Por ahora los precios no vuelven a aumentar.
Hasta ayer, el primer día de
agosto, los expendedores de combustibles del país no recibieron comunicación
alguna sobre nuevos incrementos en el valor de los combustibles. Sin embargo,
en el sector predomina la incertidumbre, que va atada a la realidad económica
argentina, por lo que tampoco los empresarios descartan de plano la posibilidad
de nuevos “retoques” en el precio de las naftas y del gasoil.
“Hasta hoy (por ayer) no tengo
noticias de que esté por haber algún aumento”, le dijo a NORTE el chaqueño
Oscar Díaz, presidente de la Confederación de Entidades de Comercio de
Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (Cecha), la entidad madre que
agrupa a todas las cámaras empresarias que nuclean a las estaciones de servicio
de todo el país. Sin embargo, no descartó tampoco la posibilidad de nuevos
“reacomodamientos” en los precios.
En el mismo sentido se expresó
Miguel de Paoli, titular de la Cámara de Expendedores de Combustibles y Afines
del Chaco (Cecach): “No tenemos nuevos valores definidos hasta el momento. Pero
tampoco una comunicación oficial de lo que pueda pasar con los precios en los
próximos 15 días”, sintetizó desde Buenos Aires, donde el jueves participó en
la reunión mensual de la Cecha, que esta vez contó con la disertación del
economista Carlos Melconian.
El común denominador del panorama
trazado por ambos fue la preocupación ante la situación macroeconómica del país
por el conflicto con los fondos buitre y el pago de la deuda. A partir de
entonces todo se torna incierto y trazar una perspectiva hacia fin de año
parece misión imposible. Con todo, según datos oficiales, entre enero y el 1º
julio los combustibles en el país aumentaron un 40%, porcentaje que “pesa”
todavía más en el norte del país, donde la nafta y el gasoil son más caros que
en el resto del territorio.
“ESTAMOS EQUILIBRADOS”
“Hay una política de recuperar el
precio del combustible, que durante mucho tiempo estuvo entre un 20 y 30% por
debajo de los países limítrofes”, analizó Díaz, tras recordar que la
remarcación es definida siempre por la petrolera estatal YPF, y a partir de
allí las demás reajustan los valores de sus productos.
“Desde la estatización de YPF el
gobierno tomó una posición diferente, la de reacomodar progresivamente los
valores de los combustibles. No sé si llamarlo aumento”, indicó el empresario
chaqueño que conduce la Cecha. Así, a título personal, consideró que “en este
momento ya estamos equilibrados con países limítrofes” en materia de precios de
combustibles. “Es decir que el reacomodamiento ya está. Pero en vistas de esta
situación que vive el país hoy con los problemas externos, nadie asegura que
continúe la misma política”, sostuvo, y opinó que éste “no es momento para un
aumento”.
Con respecto a la caída en las
ventas de combustibles, Díaz consideró que las perspectivas para lo que resta
del año van atadas a la actividad económica del país. “El combustible tiene una
demanda inelástica, es decir, que un límite para abajo y para arriba. La gente
siempre tiene que comprar, entonces puede que baje un poco la venta, pero esa
baja no será la misma de otros productos que son prescindibles”, explicó. De
ahí que consideró que si bien puede continuar la caída en las ventas, el
porcentaje no escapará a las previsiones de una situación de estancamiento de
la economía nacional.
IMPACTO EN LAS ESTACIONES
Oscar Díaz, presidente de la
Confederación de Entidades de Comercio de Hidrocarburos y Afines de la
República Argentina.
Por último, Díaz se refirió al
impacto de la situación en las empresas expendedoras de combustibles. “La realidad
es mala”, definió, y dijo que ese panorama “se viene manteniendo constante
desde hace tiempo, con pequeñas soluciones circunstanciales que se dieron”.
Pese a esas definiciones, Díaz
reconoció que el panorama en el sector “es negativo”, ya que su desempeño
“depende del nivel de ventas”. Así, precisó que la gran mayoría de las
estaciones de servicio del país venden por debajo de 300 mil litros por mes,
una medida promedio que está al borde de la rentabilidad. Entonces, con los
incrementos salariales al personal y la presión impositiva, las empresas
enfrentan un contexto complejo.
Finalmente, señaló que el
problema del abastecimiento fue superado, aunque mucho tuvo que ver la baja de
la demanda. Ante un eventual crecimiento y vigorización de las ventas, la
situación puede volver a las épocas del desabastecimiento.
“ESTAMOS MUY PREOCUPADOS”
Tras confirmar a NORTE que no
existen por el momento indicios de un nuevo incremento en el valor de los
combustibles, Miguel De Paoli analizó: “Hay un contexto macroeconómico al cual
ningún mercado puede escapar y menos el de combustibles, porque las
fluctuaciones que ocurran en la economía directamente van a impactar en los
precios de los combustibles”.
En ese orden, y mirando las
variables macro, además de eventuales movimientos del tipo de cambio, el
empresario admitió que los aumentos son prácticamente inevitables.
Por otra parte, comentó que los
representantes del sector que se reunieron en la sede de la Cecha y oyeron la
exposición del economista Carlos Melconian quedaron “muy preocupados”. “Somos
pymes que invierten sus utilidades en la empresa y para ello debemos tener
rentabilidad”, resaltó, y advirtió en ese orden la incidencia que tiene la
caída en las ventas y la consecuencia posible en la reducción de personal.
Al respecto, De Paoli aseguró
que, por el momento, no hubo despidos en el sector, aunque “hay puestos de
trabajo que no se han repuesto”, en referencia a las renuncias. “En términos
generales, hay empresas que están muy comprometidas, sobre todo las que tienen
más dificultades de suministro de combustible. Las estaciones de bandera blanca
son las más débiles y las más expuestas a estos escenarios”, alertó.
“Esperemos no chocar. Esto
significa que la situación macroeconómica de la cláusula Rufo (para el pago de
la deuda) no termine siendo un torbellino que nos lleve a vivir experiencias
pasadas en la economía”, reflexionó el empresario, y agregó: “Mi optimismo va
en el mismo sentido de que el país pueda mejorar. Apostamos a que podamos
invertir, porque es la salida de épocas inflacionarias. Pero se deben generar
las condiciones apropiadas para que las pymes puedan mantener el nivel de
actividad y empleo y solventarlas con rentabilidad”.
http://www.diarionorte.com/article/109622/combustibles-no-es-momento-para-un-aumento-advierte-oscar-diaz